Coloso


Es el coloso muerto, restos de una nación.
Orgulloso se levanto, de bronce, acero y hierro
para hoy yacer como restos patéticos de si mismos.

A muerto el gigante, gritan por la calle jubilosos
aquellos llamados a erguirse como los nuevos amos,
el nuevo Imperium, el nuevo enemigo rabioso.

Cantaron canciones orgullosas, gloriosas, marchantes
hoy yacen olvidados en tumbas sin nombres
sin nadie que les llore o les deje flores.

Esclavos de la idea la de democracia salvadora,
que no es más que un fantasma que cuelga
como una espada de Damocles sobre la vida.

Redefinieron el enemigo a los vencidos
los transformaron en eternos culpados
por aquellos que murieron colgados.

Que diferencia hay en los ángeles vencedores
o en los demonios patéticos de los vencidos
si al final es cambiar de amo a los esclavos.

La juventud se ha ido con los sueños de una nación,
y fueron borrados de aquel recuerdo orgulloso
no queda más que decir que murieron en vano.

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Imagen: Selección de "Triptychon Der Krieg" de Otto Dix

Comentarios

Siesp... dijo…
Algo que me intriga (y pido perdón por el mero hecho de dudar): ¿Son tuyas estas odas?

Verdaderamente preciosas. Si yo creyera en las reencarnaciones diría que eres la reencarnación de Goethe, y no por dramaturgo, sino por alemán, jejeje.

Un abrazo.
Sebastian dijo…
Son mias en un 100% (la inspiracion como siempre es robada).
Preferiria ser la reencarnacion de Schiller que de Goethe.. algo de gusto personal.
Saludos
Siesp... dijo…
Ah, bribón! Jejeje. Imagino que, entonces, te habrá gustado el lema de mi blog.
Sebastian dijo…
De hecho fue lo primero que me llamo la atencion