Rodeado de trabajo

Rodeado de papeles, cartones, corrugadoras y balances.
Lleno de cálculos, fechas, papeles, papers y deslices.
Pero solo pienso en ti, allá a lo lejos donde estés.
Entre cada linea, sonrío con tu sonrisa suave,
suspiro imaginándote durmiendo plácidamente esta noche.
Esperando que sea mañana para leer tus sueños finalmente.

Rodeado de manuales, tinta, lapices, ecuaciones.
Gasto mis horas entre paginas interminables,
con información insulsa, palabras vacías, que nadie lee.
Mientras para mis adentros grito tu nombre dulce,
aquel que pude leer escondido entre binarios pares,
mientras las estaciones pasaban en nuestros mundos indiferentes.

Aprendí de lo que escribiste, dijiste y viviste.
Me acerco a la felicidad de a pasos comunes,
me acerco al jardín en que alguna ves jugué.
Hoy estoy rodeado de números, letras y papeles,
pero es como si no estuvieran aquí, no tuvieran ser.
Estoy cantando quizás como hace tiempo no pude.

Debo cambiarle el nombre al blog, mejor porcentaje.
Se acerca más a la plenitud, a jugar con él.
Sigo rodeado de manuales, papeles, fechas y balances,
pero quisiera correr por las calles bajo arboles
pateando sus hojas, sintiendo el frío en mi piel,
mientras canto tu nombre, velandote mientras duermes.

Imagen: Maida