El otro día
El otro día descubrí tu nombre, el otro día corrí.
El otro día corriste, quizás debí escuchar.
Me detesto por la falta de valor, de mirar un segundo más.
Como un desierto recorro grises veredas, hasta verte cara a cara.
Y allí es donde huyo sin razón.
El otro día te vi fugazmente, y me quede allí.
El otro día no nos encontramos, y lo sentí.
El otro día venias por una calle inesperada, y me sorprendí.
Detesto no tener el valor de aguantar la mirada.
O de no actuar como un idiota.
Allí es donde huyo sin razón.
-
Parte de un sueño y parte de la realidad, parte de lo que sueño despierto en ves de hacer el trabajo de control de vibraciones, parte de lo que pienso cuando voy en la micro.
Imagen: Niklas Sundin
El otro día corriste, quizás debí escuchar.
Me detesto por la falta de valor, de mirar un segundo más.
Como un desierto recorro grises veredas, hasta verte cara a cara.
Y allí es donde huyo sin razón.
El otro día te vi fugazmente, y me quede allí.
El otro día no nos encontramos, y lo sentí.
El otro día venias por una calle inesperada, y me sorprendí.
Detesto no tener el valor de aguantar la mirada.
O de no actuar como un idiota.
Allí es donde huyo sin razón.
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Parte de un sueño y parte de la realidad, parte de lo que sueño despierto en ves de hacer el trabajo de control de vibraciones, parte de lo que pienso cuando voy en la micro.
Imagen: Niklas Sundin
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