Nacimiento y muerte del día de invierno

Hágase la luz….
Y la luz se hizo…
Nació el día…
Y murieron los antiguos luceros…
Sus ojos derramaron lágrimas…
No por sus muertos…
Sino por su corta vida…
No era un día como otros…
Era un día radiante…
Todo un joven día de invierno…
Y salio triunfante detrás de la cordillera…
Era quizás muy frió…
Pero a nadie le importaba…
Pues era su día único…
Y estaba feliz…
Saltaba en su gloria y orgullo…
De ser querido por tantas almas…
Pero de pronto comenzó…
Ya no los veía de altura…
Comenzó su descenso…
Pero no estaba triste…
Se iría contento…
Por ser un día de luz…
Y moriría con el nacimiento…
De luceros nuevos y radiantes…

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Imagen: Niklas Sundin @ Cabinfevermedia.com